miércoles, 4 de agosto de 2010

La selección aplastó a Brasil

Delfino defendido por Tavernari (Foto: FIBA Américas)

Argentina arrancó su ciclo de amistosos preparativos para el Mundial de Turquia con una clara victoria por 94 a 58 ante un flojísimo equipo de Brasil.
Los méritos del triunfo estuvieron en la gran defensa desplegada por el equipo nacional y la descollante tarea de Luis Scola, quien acabó con 30 puntos, 8 rebotes y 14 de 20 en dobles e hizo lo que quiso con los juveniles internos de Brasil.
Fue muy sobrio el trabajo de Hernán Jasén, quien disimuló muy bien la ausencia de Andrés Nocioni en el quinteto inicial. El alero bahiense tuvo una gran labor defensiva y se mostró certero desde los 6,25m con 3 de 6 en triples.
Otros puntos altos en el equipo vinieron por el lado de Prigioni, Delfino y Oberto. El base fue el conductor del equipo (10 asistencias), mientras que el escolta santafecino, de quien se dudaba su participación por un dolor en la zona lumbar, mostró toda su categoría y acabó como el segundo goleador del equipo con 20, demostrando que tal vez no se extrañe demasiado la presencia de Manu Ginóbili, por lo menos desde lo deportivo.
En tanto que el pivot de Las Varillas realizó su trabajo habitual (9 rebotes y 3 asistencias) al que le sumó una importante cuota de gol (15 con 7/9 de cancha), mostrandose agresivo para atacar el aro.
Kammerichs y Figueroa cumplieron en sus minutos en cancha mientras que Quinteros y Gutierrez hicieron un buen trabajo defensivo pero no anduvieron derechos para el aro (2/13 de cancha entre ambos).
Por el lado de Brasil poco y nada. Se mostró como un equipo de clase C y sin demasiada voluntad. Apenas Arthur, Bruno y Rafael alcanzaron una aceptable tarea.

¿Conclusiones positivas que deben ser tomadas con recaudo por ser el primer partido amistoso y ante un rival de poca calidad?

- La recuperación de Oberto en la ofensiva.
- El buen trabajo de Jasen.
- La mejoría física y basquetbolística con respecto a los inicios de los procesos anteriores.
- La intensidad defensiva.
- El hambre de gloria intacta.
- Los buenos momentos de Delfino y Scola.

Veremos como sigue la historia. Mañana es el duelo ante Puerto Rico y tendremos la posibilidad de ver como se acoplan otros jugadores. Por el momento, la ilusión está intacta.

2 comentarios:

Alejandro Díaz Triguero dijo...

La verdad es que Argentina tiene un auténtico equipazo. Si Scola y Oberto son capaces de rendir bien durante 30 minutos por partido es un equipo muy difícil de ganar.

Saludos

Unknown dijo...

Anoche fue un exhibición. Vamos a ver que pasa contra un rival mas serio.
La verdad es que tenemos un gran equipo pero lo que mas entusiasma es la actitud ganadora y positiva que transmiten estos muchachos.
Me encantaría ver una final Argentina-España, el basquet se lo merece.
Un abrazo y gracias por participar siempre de mis posteos!